domingo, 7 de agosto de 2022

RFI: Cognac consagra una exposición a la filoxera, una epopeya humana y científica

MUNDO CIENCIA


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Por: Ivonne Sánchez

 

En Cognac, la exposición Phylloxera, une épopée humaine et scientifique, busca hablar de la crisis vitícola que azotó a Europa y a otras regiones del mundo a fines del siglo XIX a raíz de un diminuto insecto, la filoxera, emparentado con los pulgones y originario de Estados Unidos. Y si bien el mal vino de ese país, también fue de Estados Unidos que se encontró la solución. Una epopeya humana y científica para vencer a este parásito de la vid.  

Qué mejor que Cognac, ciudad famosa por su coñac, un tipo de brandy elaborado a partir del vino de uva blanca y cuya producción se exporta en un 99 % al mundo entero, para acoger una exposición sobre la filoxera, un insecto diminuto, parásito de la vid, originario del este de Estados Unidos y que contaminó en 1863 los viñedos franceses para luego infestar progresivamente los viñedos de todo el mundo provocando una crisis vitícola sin precedentes. 

La exposición en realidad está en dos museos, la primera parte en el MAH, Musée d’art et d’histoire, donde se habla más de la situación vitícola antes de la llegada de la filoxera, en pleno apogeo, de los comerciantes del coñac y de los ciclos de este diminuto insecto que primero ataca las raíces y después, cuando se convierte en mariposilla, se come las hojas, destruyendo por completo las vides.

La segunda parte de la exposición está ubicada en el moderno museo M’CO (Musée des savoir-faire du cognac) y se concentra más en las soluciones que se buscaron para combatir a este insecto. Y si bien el mal vino de Estados Unidos, pues este insecto llegó en los barcos que venían de este país, la solución, paradójicamente, también llegó de allá.

En la primera parte de la muestra, en el Museo de Arte e Historia, se propone comprender mejor el ciclo de la filoxera a través de un cuarto oscuro y con una lámpara se descubren aspectos de este insecto emparentado con los pulgones. También se puede ver el interior de una casa típica de la región de Charente de aquella época de riquezas, antes de que llegara este destructivo pulgón, así como retratos de productores o comerciantes de la bebida…

Del Museo de Arte e Historia el visitante puede atravesar las calles de Cognac para dirigirse al segundo museo, el M’CO, Museo del Savoir Faire del Coñac, a orillas del río Charente, en el que se presentan las diferentes soluciones que se buscaron para combatir a la filoxera...

Productores y científicos se encontraron desamparados frente a los estragos causados por la plaga, se intentaron múltiples remedios, entre ellos, inundar con agua los viñedos, pues a la filoxera no le gusta el agua, pero esta solución era muy difícil de llevar a cabo y no era una opción para los viñedos que se encuentran en terrenos inclinados.

Otro de los métodos fue tratar las plantas con sulfato, pero esta solución también tenía muchas limitaciones, además de ser un tratamiento muy tóxico.

En realidad, se necesitaron más de 30 años para superar la plaga gracias a la tercera solución, portainjertos de vides americanas que eran naturalmente resistentes a la filoxera, ya que sus raíces son mucho más gruesas y por lo tanto, más resistentes a la filoxera. ​El injerto pues consistía en una raíz de una vid americana con una cepa local para la parte superior. 

Desde que se utiliza este sistema, la filoxera se ha convertido en un problema menor. Actualmente todos los viñedos del mundo excepto los chilenos, argentinos, algunos españoles y los plantados en suelos arenosos son injertos de este tipo.

Las únicas regiones vinícolas del mundo que se consideran libres de filoxera son Chile, las Islas Canarias​ (España), la isla de Creta (Grecia) y Chipre.

Con el tiempo se descubrió que los viñedos plantados en suelos arenosos eran resistentes al insecto, ya que a la filoxera se le dificulta la construcción de túneles por los que llegan a las raíces y son más bien los suelos calizos donde progresa este insecto. 

Una apasionante muestra que puede visitarse en la bella ciudad de Cognac hasta el 31 de diciembre de 2022.

Agradecemos a Ana-Elisabeth Cléry, Directrice de la valorisation des musées de Cognac, por la visita guiada a esta exposición.