Tomoe, vestida con el kimono de entrenamiento, ensayaba los golpes de kidachi a la espera de que llegase su turno para batirse en combate, mientras en el centro del patio se enfrentaban por parejas varios samuráis al servicio de Kaneto. La muchacha acababa de cumplir trece años y era fuerte y alta para su edad, si bien los contornos de su cuerpo eran todavía aniñados. Vestida con la ropa de entrenamiento y con el pelo recogido parecía un adolescente de facciones inmaduras. Sin embargo, cuando se soltaba la larga melena y su espesa caballera le caía a ambos lados del rostro se revelaba como una hermosa joven de rasgos decididos, casi insolentes.
Cuatro años atrás, Tomoe había convencido a su padre de que le enseñara a usar la espada, y lo cierto era que poseía un dominio nada desdeñable del palo largo, la lanza y la naginata. Su técnica era sumamente depurada, se movía con rapidez y suplía su inferioridad física con una ferocidad que a menudo llegaba a desconcertar a sus rivales.
- ¡Tomoe! – gritó Kaneto -. Ven.
Ella corrió el centro del patio. Aquel día le tocaba combatir contra Komaomaru, su hermano de leche, el cual había adoptado su nombre de adulto tras haber pasado por el genpuku. Ahora se llamaba Yoshinaka, si bien a Tomoe le costaba dirigirse a él de ese modo.
- ¿Estás preparada o prefieres retirarte? -preguntó el.
Tomoe dedicó a Yoshinaka una mirada desafiante.
Página 16 y 17. La primera samurái. Mitos y leyendas de Japón. Mitos y leyendas de Japón. RBA. 2024
MÁS INFORMACIÓN
- Libro La primera samurái. Mitos y leyendas de Japón.
- Libro: La yurei Otake. Mitos y leyendas de Japón
- Libro: La yokai Tamamo. El poder de la kitsune. Mitos y leyendas de Japón
CADENA DE CITAS
- Antes - Cita DCCLXXIX: El poder de la vida y de la luz
- Después - Cita DCCLXXXI: La cascada de los espíritus. La mujer sin rostro