Hasta 1860 lo correcto era nacer en tu propia casa. Hoy, según me dicen, los grandes dioses de la medicina han establecido que los primeros llantos del recién nacido deben ser emitidos en la atmósfera aséptica de un hospital, preferiblemente en un hospital elegante. Así que el señor y la señora Button se adelantaron cincuenta años a la moda cuando decidieron, un día de verano de 1860, que su primer hijo nacería en un hospital. Nunca sabremos si este anacronismo tuvo alguna influencia en la asombrosa historia que estoy a punto de referirles.
Les contaré lo que ocurrió, y dejaré que juzguen por sí mismos. Los Button gozaban de una posición envidiable, tanto social como económica, en el Baltimore de antes de la guerra. Estaban emparentados con esta o Aquella Familia, lo que, como todo sureño sabía, les daba el derecho a formar parte de la inmensa aristocracia que habitaba la Confederación. Era su primera experiencia en lo que atañe a la antigua y encantadora costumbre de tener hijos: naturalmente, el señor Button estaba nervioso. Confiaba en que fuera un niño, para poder mandarlo a la Universidad de Yale, en Connecticut, institución en la que el propio señor Button había sido conocido durante cuatro años con el apodo, más bien obvio, de Cuello Duro.
Primeros parrafos del libro El curioso caso de Benjamin Button
Es un relato escrito por el autor estadounidense F. Scott Fitzgerald publicado por primera vez en la revista Collier's el 27 de mayo de 1922. Posteriormente fue publicado dentro del libro antología Tales of the Jazz Age. Los derechos de este relato pertenecieron al productor estadounidense Ray Stark hasta su muerte en 2004. Fitzgerald se inspiró en un comentario de Mark Twain. Benjamin Button nace con una extraña enfermedad, que provocaba que naciera con 80 años y fuera rejuveneciendo con el paso de los años. Una afección que existe en la realidad bajo el nombre de progeria o síndrome de Hutchinson-Gilford. En 2008 se realizó la adaptación al cine, que fue dirigida por David Fincher, con guion de Eric Roth y protagonizada por Brad Pitt y Cate Blanchett. El guion difiere bastante de la historia original, y solo coincide en el título, el nombre de Benjamin y algunos aspectos del proceso de rejuvenecimiento. Aunque, en un principio, es una historia para adultos, con motivo de la adaptación cinematográfica de 2008 de la novela, se publicó un cómic que fue una adaptación mucho más fiel del libro de lo que lo fue la película que resulta más accesible para aquellos que no se atreven con el formato original.
F. SCOTT FITZGERALD
Francis Scott Key Fitzgerald (Saint Paul, Minnesota, 24 de septiembre de 1896-Hollywood, California, 21 de diciembre de 1940) fue un militar, anfitrión, novelista y escritor estadounidense, ampliamente conocido como uno de los mejores autores del siglo XX, cuyos trabajos son paradigmáticos de la era del jazz. Fitzgerald es considerado miembro de la Generación Perdida de los años veinte. Escribió cinco novelas: El gran Gatsby, Suave es la noche, A este lado del paraíso, Hermosos y malditos y El último magnate,
que, aunque sin terminar, fue publicada tras su muerte. Escribió
también múltiples historias cortas, muchas de las cuales tratan sobre la
juventud y las promesas, la edad y la desesperación.
MÁS INFORMACIÓN
- Libro: El fantasma de Canterville. Pequeños tesoros de la literatura
- Libro: La leyenda de Sleepy Hollow. Pequeños tesoros de la literatura
- Libro: Noches blancas. Pequeños tesoros de la literatura
Autor(es): F. Scott Fitzgerald
Editorial: RBA
Páginas:
Tamaño: 13 x 20 cm.