Describe como esa señera institución modelo una revolución artística y cultural, teniendo como varita mágica a la danza folclórica altiplánica recopilada con paciencia, captada con intensidad y resemantizada con talento y afecto hacia el mundo indígena de Puno. Para ese inigualado cometido los señores puneños, médicos, profesionales y aun hacendados y terratenientes, se despojaron de sus trajes habituales, eliminaron prejuicios y se vistieron con la vestimenta de los indígenas para mostrar en los escenarios, primero en Puno y luego del Perú y del extranjero, la valía y pureza de los diversos sentimientos de un pueblo que nunca estuvo sojuzgado, a pesar de estar dominados. Y no lo hicieron como divertimento, a la usanza del amante diletante que se divierte y goza por gozar, sino que lo hicieron con esfuerzo, entrega, mimesis y respeto por el mundo andino, contribuyendo a que desde el arte hombres y mujeres del Altiplano-Titikaka fraguaran su libertad y afirmaron su identidad. Ya lo dijo el insigne José María Arguedas al referirse a la Embajada Folclórica de Puno, es decir, a APAFIT, que el arte autentico consubstanciado con el mundo indígena: "… tenía que ser de Puno". Un libro que marca un antes y después, signado por trayectorias que comprometieron e hicieron participar a centenares de puneños visionaros y puneñas alegres y creativas.
CONTENIDO
- Posdata al amigo viento
- Introducción
- Apacible, siempre musical y a veces agitado
- Grau 310
- El nacimiento de una pasión
- Carlos Renato
- Polifonia y polinización armónica
- Llegó Lima a Puno cuando Puno fue allá
- Distanciamiento y fractura
- Entrega sin claudicación
- Testimonios
- Ellas, ellos y destellos
Más información de APAFIT:
Agrupación Puno de Arte Folklórico y Teatro
MÁS INFORMACIÓN
HERNÁN CORNEJO-ROSELLÓ DIANDERAS
Es puneño e impenitente lector, y amante confeso de lecturas de toda versión sin ninguna exclusión. Lee, lee y lee, y en ese ritmo ha construido amistad como basamento esencial de su existencia; aun así, desde los 17 años, su más fiel acompañante es su inseparable bigote junto a espejos fieles que reproducen su imagen. El nos dice que cuando la parca se lo lleve, en su lapida rece como epitafio somero: "Aquí yace un puneño", porque aún de muerto nunca dejará de ser puneño, su patria de todas las patrias.
Jaime Hernán Cornejo-Roselló Dianderas | Facebook
Autor(es): Jaime Hernán Cornejo-Roselló Dianderas
Editorial: Del autor
Páginas: 600
Tamaño: 21,5 x 28 cm.