Hace 25 años estaba en Europa, específicamente en Alemania, y quien lo iba a saber en ese momento; un momento histórico, no solo para Alemania, sino para el mundo. Alemania cambio y el mundo también.
Lo llaman ahora, la caída del muro de Berlín, hace 25 años de ese suceso.
Lo visible al mundo también, fue que la URSS como tal dejó de existir, para convertirse en la Unión Soviética, proceso que se había iniciado años antes, más conocido como la Perestroika de M. Gorbachov. El comunismo como tal había fracasado.
A la caída del muro de Berlín, se unificaron la República Federal Alemana y la República Democrática Alemana separadas desde 1961 y hasta su caída en 1989.
Tomemos la caída del muro de Berlín, como un ejemplo a seguir en nuestra vida personal.
¿Cómo?
¿Qué dice Antonio? te estarás preguntando
Si has construido o has encontrado muros los cuales te impiden avanzar, progresar en tu camino de vida y estas estancado.
Aplica la técnica de la caída del Muro de Berlín.
Derriba tu muro o muros. Si tienes un conflicto con alguien soluciona, si hay que perdonar, perdona, pasa página y sigue adelante.
Te estarás diciendo, es fácil que lo diga, Antonio. Llevarlo a la práctica es difícil y como duele. Sí, es cierto, duele. Prefieres que duela fuerte un solo momento o que te duela poco por siempre. Personalmente prefiero un dolor fuerte que dure un solo momento, a uno suave que dure siempre.
Así como el niño aprendió a caminar, dando el primer paso. También nosotros debemos de dar ese primer paso que nos llevara a nuevas y mejores etapas de nuestras vidas.
La lección que debemos obtener de un hecho que ocurrió hace 25 años, es para nuestro propio beneficio.
Da los pasos necesarios, para renovarte, cambiar y salir adelante, superando los desafíos que la vida nos pone. Sepamos sortearlos y que nos sirvan de combustible para conseguir lo que queremos de la vida.
Cada uno de nosotros tendrá sus expectativas, no tenemos que demostrar a nadie más que a nosotros mismos lo bueno y fuerte que somos.
Que no existan más muros de Berlín en tu vida, derríbalos, deshazte de los escombros, barre bien y a empezar de nuevo.
Fija tu propia fecha, como la del 7 de noviembre en que se conmemora la caída del muro de Berlín, para que te des cuenta que tienes algo que festejar, tu libertad, tu progreso, el ser tú mismo.
Dejemos los pretextos o excusas de lado y no nos amparemos en ellos, o eres de los que siempre tiene una excusa para todo y todos son culpables menos uno mismo.
Antonio Tomasio. Autor de los libros Uno (Yo) y Mi hijo, mi maestro. Escríbe a atomasio@antoniotomasio.com con tus preguntas o sugerencias o visita la página www.antoniotomasio.com
