jueves, 8 de octubre de 2015

Poeta 307: Instrucciones de Amenemhat


INSTRUCCIONES DE AMENEMHAT

También llamada Enseñanzas del rey Ammenemes a su hijo Sesostris. Poema escrito en Egipto durante el Imperio Medio. Está escrito como un monólogo que el espíritu del asesinado rey Amenemhat I dirige a su hijo Senusert. Describe la conspiración que acabó con su muerte, e insta a su hijo para que no confíe en nadie. El poema es también una apología del reinado del viejo faraón, y termina exhortando a Senusert a gobernar sabiamente siguiendo los pasos de Amenemhat. Además, el relato tenía como finalidad el consolidar la legitimidad de Senusert, dejando clara la intención del fallecido de dejarle como heredero.

Las instrucciones posiblemente se escribieron por orden de Senusert, tanto para exaltar la memoria de su padre como para legitimar su derecho al trono. Varios siglos más tarde, en el papiro Chester Beatty IV, el poema fue atribuido a Jeti, «el primero entre los escribas». La fuente principal de este documento fue el Papiro Millingen, copiado por A. Peyron en 1843, y que está perdido. Subsisten tablillas de madera y ostracas de la dinastía XVIII, con diversos fragmentos.

TEXTO DE LAS INSTRUCCIONES DE AMENEMHAT

Comienzo de la enseñanza
que hizo la encarnación del Rey del Alto y del Bajo Egipto: Sehetep-ib-Ra,
Hijo de Ra: Amenemhat, el justificado.
Fue con un mensaje de Maat que él habló
para su hijo, el señor de la totalidad.
El dijo, habiéndose elevado como un dios:
Escucha lo que te diré
y cuando reines en la tierra, gobiernes las orillas,
obtendrás el bien en abundancia.

Desconfía de los subordinados que no son nada,
de cuyas intenciones nadie se preocupa;
no te aproximes a ellos en tu soledad.
No confíes en un hermano, no conozcas (ningún) amigo,
no te hagas íntimos, no hay provecho en eso.

Cuando descansas, que tu propio corazón te custodie,
porque un hombre no tiene partidarios
el día de la adversidad.
Yo di al necesitado, crié al huérfano;
hice obtener (algo) al que no tenía nada como al que tenía.

Pero fue uno que comió mi comida el que provocó la rebelión,
aquél a quien había dado mis manos urdió el complot con ellas.
Los que se vestían con mi lino fino me miraron como (si fuera) paja (?),
y aquellos que se perfumaban con mi mirra, escupieron ante mí (?)

Mis imágenes vivientes, mis porciones entre los hombres,
me provocaron una aflicción como nunca se escuchó,
un gran combate como nunca se vio.
Cuando se pelea en la arena y el ayer es olvidado,
no hay un buen fin para el que ignora lo que debería saber.

Fue después de la cena, ya había anochecido,
y yo pasaba una hora descansando.
Me había acostado en mi cama, estaba cansado,
y mi corazón había comenzado a seguir a mi sueño.
Entonces las armas que eran para mi protección fueron vueltas contra mí,
mientras yo me comportaba como una serpiente del desierto.

Me desperté en (medio de ) la lucha y, vuelto en mí,
descubrí que era un combate de la guardia.
¡Si me hubiera apresurado, con las armas en mi mano,
hubiera hecho que los cobardes retrocedieran aterrorizados!
Pero nadie es valiente en la noche, nadie puede luchar solo,
ningún hecho afortunado ocurrirá sin un protector.

Mira, la agresión ocurrió mientras estaba sin ti,
antes de que los cortesanos hubieran escuchado que te transmitía (el poder),
antes de que me hubiera sentado junto a ti para aconsejarte.
Porque no estaba preparado para eso, ni siquiera lo había pensado,
mi corazón no había advertido la negligencia de los sirvientes.

¿(Alguna vez) las mujeres han liderado tropas?
¿(Alguna vez) han sido criados los alborotadores en la Residencia?
¿(Alguna vez) se ha dado curso libre al agua que arruina la tierra,
para que sean privados los hombres comunes de lo que han hecho?
Ningún infortunio me alcanzó desde mi nacimiento,
no ha sido igualado mi éxito como ejecutor de hazañas.

He viajado hasta Abu 1, he vuelto hasta el Delta,
habiéndome parado en los bordes de la tierra, he observado su interior.
Si alcancé los límites del poder,
es gracias a mi fuerte brazo y a mis manifestaciones

Era yo el que producía el grano, el amado de Nepri 3,
Hapy 2 me honró sobre cada llanura,
Nadie tuvo hambre en mis años, nadie tuvo sed entonces.
(Los hombres) se sentaban por lo que yo había hecho, hablando sobre mí;
todo lo que he decretado está en orden.

Sometí leones, capturé cocodrilos,
dominé al pueblo de Wawat 4, capturé a los Medjay 5,
obligué a los asiáticos a marchar como perros.

Me construí una tumba adornada con oro,
su techo con lapislázuli,
con muros de plata,
piso de madera de sicomoro (?),
puertas de cobre,
y cerrojos de bronce.
Hecha para siempre, preparada así para la eternidad,
lo sé porque soy el señor de todo eso.

Por cierto, los hijos de los hombres están en las calles,
el sabio dice "sí", el necio dice "no",
porque él no se reconoce, privado de tu mirada.
¡Sesostris, hijo mío!
Mis pies parten, pero mi propio corazón está cerca.
Mis ojos contemplan para tí a los nacidos en un período de tranquilidad,
junto al pueblo del sol, ellos te rinden adoración.

Mira, yo he actuado previamente y he asegurado para ti el final,
llevaré a puerto para ti lo que está en mi corazón:
Tú te colocas la corona blanca de la simiente divina,
y las cosas que he iniciado para ti están en orden.
Cuando yo descienda en la barca de Ra,
elévate a la monarquía que ha existido desde antaño.
No hagas ...(?)
levanta tus monumentos, embellece tu cámara funeraria.
...............
............... 6

  1. Elefantina.
  2. El dios del grano.
  3. El dios Nilo.
  4. Pueblo de la baja Nubia, entre la primera y la segunda catarata.
  5. Pueblo del desierto sudoriental.
  6. El texto de las dos últimas líneas está demasiado corrupto en las copias disponibles.



El Papiro Sallier II, en el que se halla buena
parte del poema. Museo Británico. EA 10182/2.


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