"El estudio de la historia evolutiva de la vida recibe el nombre de filogenia. Durante siglos, los científicos han inferido conexiones evolutivas a partir del aspecto físico de los organismos. Por desgracia el parecido en cuanto a función y forma ofrece una manera tosca y a veces engañosa de valorar las conexiones evolutivas. Por ejemplo, los tiburones y los delfines comparten semejanzas superficiales como las aletas ventrales y dorsales y un cuerpo en forma de torpedo. En cambio, los tiburones son peces de sangre fría que llevan morando en los oceanos 450 millones de años (encarnan una de las criaturas más logradas de la tierra), mientras que los delfines se separaron de los tiburones en el árbol de la evolución y migraron a tierra firme hace 300 millones de años. Estos vertebrados evolucionaron a mamíferos de sagre caliente y regresaron a los mares unos 50 millones de años atrás. ¡Los delfines están mucho más emparentados con nosotros que los tiburones!"
Página 157. Una historia del Cosmos. La búsqueda de vida en el Universo desde el inicio de los tiempos. Chris Impey. Planeta. Barcelona, España - 2010.
CADENA DE CITAS
- Antes - Cita CXV: Andahuaylillas, Huaro y Canincunca
- Después - Cita CXVII: ¿Qué es lo imprescindible?