SEMANA III, AÑO I
JOSE MARIA EGUREN
Nació en Lima en 1874. Su infancia y su juventud - sanas, sosegadas - transcurrieron en "Chuquitanta", hacienda de su familia, situada en los alrededores de Lima. Un cambio de fortuna de sus padres obligó a la familia a trasladarse al apacible balneario de Barranco. Allí, al lado de su hermana Susana, buena pianista y cantante, llevará por largo tiempo, una existencia íntegramente dedicada a la música, la pintura y la poesía. Solía dar largos paseos por el camino que llevaba a Lima. Se entretenía tomando apuntes para sus óleos o captando imágenes con una máquina fotográfica de su invención, hecha con un diminuto tintero, que imprimía placas de un centímetro. En su casa, se dedicaba a la lectura de los clásicos españoles, a escribir versos y a confeccionar juguetes, ya de corcho, ya de vidrios de color. En 1911 publicó Simbólicas y en 1916 La canción de las Figuras. Solo algunos críticos reconocieron públicamente los grandes méritos del nuevo poeta. Su nuevo lenguaje, sus imágenes inesperadas, su simplicidad desconcentraban y obligaban al esfuerzo interpretativo. Hacia el ocaso de su vida, cuando se veía enfermo y pobre, el poeta José Gálvez, entonces Ministro de Educación Pública, lo llevó a su ministerio con el cargo de bibliotecario. Tiempo después fue empleado del Museo Nacional. Murió en 1942.
LOS REYES ROJOS
Desde la aurora
Combaten los reyes rojos,
Con lanza de oro.
Por verde bosque
Y en los purpurinos cerros
Vibra su ceño.
Falcones reyes
Batallan en lejanías
De oro azulinas.
Por la luz cadmio,
Airadas se ven pequeñas
Sus formas negras.
Viene la noche
Y firmes combaten foscos
Los reyes rojos.