lunes, 8 de diciembre de 2025

Video 981: Batalla por la Warner | Fernando Díaz Villanueva

 

 

El viernes pasado Netflix anunció un acuerdo para adquirir las divisiones de estudios de cine y televisión y el servicio de streaming HBO Max de Warner Bros por 72.000 millones de dólares, un importe que asciende a los 82.700 millones si incluimos la deuda. La transacción, en efectivo y acciones, valora cada acción de Warner Bros en 27,75 dólares, es decir, por encima de lo que se están pagando en el mercado. Esta operación, aprobada ya por los consejos de ambas compañías, se concretará tras la separación de los activos de redes de cable de Warner (CNN, TNT y Discovery Channel) que conformarán una nueva sociedad llamada Discovery Global. El acuerdo se materializará en unos meses cuando haya pasado el filtro regulatorio. El anuncio es un capítulo más una intensa batalla de ofertas iniciada en septiembre de este año, cuando Paramount Global, presidida por David Ellison, el hijo del dueño de Oracle, Larry Ellison, se ofreció a comprar la compañía en su totalidad. Respaldado por fondos soberanos de Oriente Medio y con lazos con la administración Trump, Paramount ofrecía 30 dólares por acción. Su objetivo era fortalecer Paramount+ sumándole el amplio catálogo de Warner para competir con gigantes como Disney y Netflix. Ellison no se ha dado por vencido. Ayer mismo lanzó una OPA hostil para tentar de nuevo a los accionistas. Si el acuerdo sigue su curso Netflix, pionera del streaming, se fortalecerá apuntalando su liderazgo. Se queda con Warner Bros. Studios, DC Comics, y franquicias legendarias como Harry Potter, Batman, Superman, Juego de Tronos, Friends, The Big Bang Theory, Los Soprano, y clásicos como Casablanca y El Mago de Oz. HBO, fundada en 1972 como un canal premium de cable especializado en series y películas, aporta un archivo inmenso de más de 50 años de producción televisiva. Con presencia en todo el mundo, la fusión crearía una inmensa plataforma de video a la demanda ya que suma los 300 millones de suscriptores de Netflix a los 128 millones de HBO Max y Discovery+. Esto potenciará la retención de usuarios, permitirá reajustes de precios y afectará de lleno a la producción cinematográfica. El acuerdo plantea una serie de interrogantes regulatorios que podrían frustrar la operación. A eso mismo se agarra Paramount, que ha presionado intensamente en Washington acercándose al equipo de Trump. Para Netflix no está todo perdido. El regulador es independiente y ya en el pasado falló a favor de fusiones similares. El hecho es que en un mercado hipercompetitivo en el que Netflix se mantiene a la cabeza pero pierde terreno ante YouTube y Twitch (gratuitos y financiados con publicidad), esta fusión redefine el sector. En principio HBO Max se mantendrá, pero no sabemos durante cuanto tiempo y si seguirá explotando en exclusiva su catálogo. Para los consumidores se reduce el abanico de elección de plataforma y quizá suban los precios. En Hollywood, entretanto, asumen que la industria del entretenimiento es cosa ya de las grandes tecnológicas que poco a poco han terminado haciéndose dueñas de todo.

Fuente: Fernando Díaz Villanueva 

 

CADENA DE VIDEOS